Asociación Cultural ALE!

Cuando paseamos por nuestra ciudad o hacemos un viaje – tanto en nuestro país como en el extranjero – muchas veces nos sorprenden determinados rincones, bien por un edificio, bien por un jardín o simplemente en como la luz se filtra en determinadas horas del día.  A veces la sorpresa viene por el hecho de que nunca nos dimos cuenta en su momento y lo descubrimos, o porque en nuestra cotidianeidad se produce un cambio en un espacio en el que antes no había nada y ahora hay algo nuevo.

Esto es lo que puede ocurrir en Madrid en un rincón escondido a pocos metros del Paseo del Prado, un lugar en el que se ubicaba una antigua central eléctrica que en 1899 comienza a funcionar a cargo de la «Sociedad Eléctrica del Mediodia», para abastecer de luz a gran parte de la zona sur del casco histórico madrileño. Esta sociedad, propiedad del empresario José Batlle, encarga al arquitecto madrileño Jesús Carrasco-Muñoz Encina  el diseño de esta instalación industrial y que se integrará en el paisaje urbano madrileño hasta su desmantelamiento a finales del siglo veinte.

El espacio industrial estaba formado por dos naves longitudinales dispuestas en paralelo, con cubierta a dos aguas cada una de ellas sostenidas por una estructura metálica, las fachadas se componen de un zócalo de piedra de granito y un muro de ladrillo visto, con diversos detalles ornamentales y un remate de estilo neomudejar, similar a otros edificios del Madrid de la época. Tras su cierre, el edificio estuvo abandonado hasta su recuperación en el año 2003 por la Obra Social de La Caixa, que encarga a los arquitectos suizos  Jacques Herzog y Pierre de Meuron el diseño de una nueva sala de exposiciones, un diseño que respeta las fachadas originales del edificio, integrándolas en un nuevo espacio arquitectónico que parece «levitar» sobre el suelo. Como complemento, y para aprovechar la nueva visión que proporciona el derribo de una gasolinera próxima –  creando una plaza de acceso al centro –  se realiza una intervención en la fachada de un edificio de viviendas consistente en un jardín vertical.

¿Y porque este tostón si venimos a hablar de LEGO(R)?

Porque muchas veces, nuestros socios miran a su alrededor para inspirarse y en otras ocasiones, es la forma de un edificio o un determinado efecto visual la que enciende la chispa de la inspiración. Chispa además que nos permite  – después de un tiempo – disfrutar de nuevo de las creaciones que realiza nuestro socio Dongo que nos trae precisamente el edificio de la Central Eléctrica del Mediodia, hoy Caixa Forum Madrid.

 

Como el mismo nos cuenta en el foro de ALE! lo que quería reproducir era ese efecto de «levitación» que parece que hace el edificio en el lateral de la plaza de acceso y sobre todo, recrear el jardín vertical; una recreación, por las técnicas usadas, que no parece nada fácil pero que a la vista del resultado merece la pena ver.

 

¡Gran trabajo Dongo!